En este caso, el Papa toma como figura referente a San José para destacar las labores de un padre que decide adoptar un hijo.
Para hacer la reflexión, el Papa Francisco eligió la lectura en Mateo 1, 20b-21, en esta lectura se explica la realidad de San José como padre no biológico de Jesús, el pontífice nos explica que esto era una práctica relativamente común en Oriente, por lo que a San José no le costó reconocer a Jesús como hijo, aunque bien sabía que era el hijo de Dios, por eso el nombre que se le dio fue Jesús, que significa “el Señor salva”.
El Papa, entonces, alabando la figura de San José, anima a las instituciones para que se faciliten los procesos de adopción y que ayuden a cumplir no solo los sueños de un niño que buscan una familia, también de los esposos que le brindarán su amor y les acogerán en su hogar. Pidió por ello, por las familias deseosas de tener un hijo o hija y por los niños huérfanos, para que encuentren cuánto antes el calor de una verdadera familia.
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