La voz de los jóvenes: Ibai, Jaime Altozano y Dulceida tienen una cosa en común

En la entrada de hoy el grupo de Discípulos os traemos nuestra opinión sobre un nuevo tema de actualidad. ¡Vamos a ello! 

Como hemos dicho en el título Ibai, Jaime Altozano y Dulceida tienen algo en común. Y es que todos tienen cierta influencia sobre un gran número de personas. 

En nuestro día a día vivimos rodeados de estímulos que llegan a través de nuestro móvil: Instagram con sus historias, los reels, las publicaciones; Tik Tok con sus modas, sus canciones, sus bailes; Youtube con miles y miles de vídeos que nos pueden servir para repasar para una clase de mates o para ver qué se ha comprado alguien más o menos de nuestra edad. Las opciones son infinitas. 

Quizá nosotros, además de consumir contenido en nuestro día a día también publiquemos de vez en cuando una foto con nuestros amigos o un paisaje que nos ha gustado, nuestra comida o el último sitio que he visitado. Compartimos nuestra vida de forma ocasional por las redes con personas que nosotros hemos elegido previamente. Sin embargo, los famosos y conocidos "influencers" se dedican 24/7 a publicar su día a día en las redes sociales. 

Imagina por un momento que desde que te levantas hasta que te vas a dormir vas compartiendo tu rutina con el mundo, tu habitación, tu ropa, tu comida, tu humor, lo que estudias, si haces ejercicio o no, cómo te peinas, cómo hablas, tu tono de voz, cómo te sientes, qué cosas compras, qué opinas de un tema y de otro... Todo eso lo vas exponiendo al mundo y miles y miles de personas deciden seguirte, ver cómo es tu vida. Empiezas a recibir comentarios. Cada cuál reacciona de una manera y algunos son buenos y otros no tanto. Además notas que empiezas a tener cierta responsabilidad. Lo que dices llega a millones de personas y muchas creerán a pies juntillas lo que tú les digas. Qué extraño todo ¿no? 

Por supuesto, también obtienen otras cosas a cambio: fama, dinero, productos gratuitos, invitaciones a eventos y por supuesto influencia. Y es que aunque lo tengamos muy normalizado los "influencers" tienen un gran poder sobre la gente joven, en especial desde que cada vez se accede a las redes sociales a una edad más temprana. 

¿Y cómo consiguen esa influencia estas personas? 

Aportan contenido que el resto de personas encontramos útil o entretenido. Muchas personas comparten en sus cuentas información interesante para los demás, puede ser sobre diferentes productos, sobre cultura, actualidad, música... hay de todo. Otros influencers se caracterizan por crear contenido de entretenimiento, puede ser humor, bailes, retos... Hay tanto contenido que hay que saber elegir muy bien a qué quieres dedicarle tu tiempo y a qué no. 

¡Este es el quid de la cuestión! 

Consideramos que lo más importante es tener criterio a la hora de consumir este contenido. Te animamos a que compruebes bien la información que te llega, a que seas crítico con la realidad de las redes sociales y que no te dejes engañar. Muchas veces solo vemos el lado positivo de las vidas de estas personas y es fácil caer en comparaciones. Ahí es cuando entra tu capacidad de juzgar si eso que estás viendo es verdad, si es bueno para ti, si quieres invertir tu tiempo en ello... 

Hemos dicho antes que los influencers tienen mucho poder sobre los jóvenes, pero tú también tienes poder de elegir. Recuerda que al final esas personas tienen éxito porque tú los ves. Sé siempre crítico con todo lo que te llega y recuerda: las redes sociales no lo son todo. 

Te proponemos un ejercicio práctico. Revisa tus redes sociales, por ejemplo Instagram. Mira a las personas que sigues y localiza a esas personas que consideramos influencers. Aplica las siguientes preguntas para decidir si quieres seguir viéndoles o no. 

- ¿Te aporta valor el contenido de esa persona? 

- Cuando te salen sus publicaciones o historias ¿te detienes a verlas o las pasas rápido? 

-¿Estás de acuerdo con los valores que transmite esa persona? 

- Pregúntate ¿Por qué empezaste a seguirla? 

Esperamos que este pequeño ejercicio te ayude a depurar un poco tus redes sociales y a prestar más atención a quién quieres seguir y quién no. 

Nos despedimos y esperamos que os haya gustado. ¡Nos vemos!