Razones para seguir. Virginia Pérez Buendía


Hace ya casi un mes se conoció la noticia de que una anciana millonaria había donado su herencia tras morir a un pequeño municipio de Cuenca para que los niños de dicho lugar pudieran obtener becas para estudiar.
Virginia Pérez-Buendía es la última descendiente de una familia de empresarios harineros de Valverde de Júcar (la foto que os dejamos es la de la fábrica de la familia Pérez-Buendía). Esta mujer falleció a los 86 años en Madrid, pero la sorpresa vino cuando más tarde se leyó su testamento, que ella escribió en el año 1983, ante un gran número de vecinos de Valverde de Júcar. Todos se preguntaban a quién le dejaría toda su fortuna, pues no tenía familia. Pues bien, Virginia pedía en su testamento que se creara una fundación con su nombre para becar a los jóvenes sin recursos del pueblo para que así pudieran estudiar. Los vecinos quedaron claramente sorprendidos, pues pensaban que era un poco huraña y que por ello no dejaría nada.
Muchas veces juzgamos a las personas sin conocerlas y el acto que hizo esta mujer puede ayudar a mucha gente y más hoy en día, ya que muchas familias no se pueden permitir comprar todo el material necesario para que sus hijos estudien.

Marta Coronado y Andrea Vizcaino