Bienvenidos a otra de las nuevas
secciones que este año estrenamos en nuestro blog.
‘Pensamientos en un Cuatro Latas’ es un
rincón dedicado a hablar del Papa Francisco desde el punto de vista del ‘motor de
cambio’ que está siendo. Este nuevo papa está dando mucho de qué hablar desde
el mismo momento en que fue nombrado en este cargo y aquí queremos dar un poco
más a conocer sus novedades.
Para empezar, el nombre de la
sección, ‘cuatro latas’. Cuatro Latas es el coche que un viejo sacerdote, Renzo Zocca,
decidió regalar al papa hace unos meses. Este sacerdote, escribió una carta a
Francisco explicándole que durante 25 años había sido el párroco del bario
obrero de Saval y que durante todo aquel tiempo había tenido un compañero de
viaje que no le había abandonado en ningún momento, por duro que fuera, ya que
en aquella época tuvo que luchar mucho contra las consecuencias de las drogas
que durante los años 80 se adueñaron de un barrio cercano al suyo y en el que
él estuvo muy implicado. En este carta Renzo Zocca le decía que se sentiría muy
honrado si un papa humilde como era él aceptaba ese regalo de un cura de un
barrio obrero.
Fue el mismo Francisco el que llamó a este sacerdote para preguntarle acerca del coche y animarle a venderlo y donar el dinero a gente que lo necesita, Renzo le dijo que ese pobre ya había ayudado a mucha gente necesitada y que ahora quería que lo tuviese él. Francisco acepto y mirando su agenda, quedaron el 4 de Septiembre a las 15.30 de la tarde en el Vaticano.
Renzo Zocca se presento allí con un centenar de vecinos de su barrio a los que la Guardia Suiza no dejo entrar, y cuando nuestro papa se enteró, fue hasta la puerta a recibirlos. Acto seguido cogió su Renault 4 blanco de 1984, su ‘Cuatro Latas’ y volvió conduciendo en él hasta su residencia de Santa María.
Fue el mismo Francisco el que llamó a este sacerdote para preguntarle acerca del coche y animarle a venderlo y donar el dinero a gente que lo necesita, Renzo le dijo que ese pobre ya había ayudado a mucha gente necesitada y que ahora quería que lo tuviese él. Francisco acepto y mirando su agenda, quedaron el 4 de Septiembre a las 15.30 de la tarde en el Vaticano.
Renzo Zocca se presento allí con un centenar de vecinos de su barrio a los que la Guardia Suiza no dejo entrar, y cuando nuestro papa se enteró, fue hasta la puerta a recibirlos. Acto seguido cogió su Renault 4 blanco de 1984, su ‘Cuatro Latas’ y volvió conduciendo en él hasta su residencia de Santa María.
Un suceso peculiar que demuestra
en todos los casos la humildad y cercanía del papa a sus seguidores.