Los pasados días 26 y 27, los grupos de Emaús estuvimos disfrutando de la convivencia de Navidad en El Cortijo. Fuimos pasando por diferentes posadas para reflexionar cómo funciona nuestro entorno y cómo está nuestra vida para acoger otra vez al niño que nace. Abrimos los ojos a algunas injusticias del mundo, vimos qué soluciones podemos aportar nosotros para solucionarlas y nos preparamos para disfrutar al máximo de todo el tiempo que íbamos a pasar juntos. No faltaron tampoco los juegos, las risas, las carreras, las bromas y la diversión a todas horas en todo lo que hacíamos.
Tras una mañana de reflexión disfrutando del maravilloso paraje en que nos encontrábamos, tuvimos tiempo para adorar al niño Jesús y demostrarle lo importante que es su nacimiento para nosotros. Por la tarde tuvimos la oportunidad de dar un paso y avanzar en nuestro camino comprometiéndonos con nuestro grupo, con la asociación y con toda la gente que nos rodea a ser mejores y a caminar según nuestros valores.
Antes de irnos y mientras tomábamos un aperitivo, repartimos nuestras felicitaciones navideñas que habíamos estado escribiendo durante toda la convivencia para mostrar a las personas con las que convivimos que queremos seguir teniendo estos momentos juntos y que queremos seguir caminando con ellos.
Fueron unos días geniales en los que la ilusión de la Navidad y su verdadero significado nos acompañaron en todo momento.
Ana Campos.
