Comenzamos la convivencia realizando una actividad en la que aprendimos a ayudar al hijo pródigo, la lectura de la biblia que cuenta la historia de un hijo que se va de casa de su padre, se gasta todo su dinero, y al volver, su padre le recibe con una fiesta igualmente ya que está contento de que su hijo haya vuelto y encontrado el buen camino por fin. Más tarde, realizamos el Lavatorio de pies, un momento en el que nos comprometimos con otras personas a ayudarles en lo que necesitaran. Ese primer día, por último, revivimos Getsemaní, los últimos momentos de la vida de Jesús, donde nos dieron una rama de olivo y reflexionamos sobre como se sintió Jesús en el monte él solo. ¡Y dormimos todos juntos en el local!
Al día siguiente cantamos canciones del cancionero y fuimos a hacer el vía crucis en el cerro y hicimos varias actividades. Terminamos el día teniendo una reunión con nuestro grupo correspondiente y celebrando la vigilia ¡Jesús está vivo!
¡Nos la pasamos genial y aprendimos mucho sobre Jesús!
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